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Para los niños, el verano es el momento de descansar, disfrutar de unas vacaciones en familia, acampar y divertirse con amigos. Con horarios más relajados, también aumenta la frecuencia de los juegos por internet, mensajes de textos y el tiempo que pasan en redes sociales. El receso de verano puede ser un excelente momento para que los padres repasen estrategias de prevención del acoso, fortalezcan la comunicación con sus hijos y se preparen para el año escolar que se avecina. Los siguientes consejos pueden ayudar a los padres a fomentar experiencias positivas, amistades y una transición satisfactoria de sus hijos hacia el año escolar que comienza.
- Ponga y mantenga límites sanos ara el uso de dispositivos electrónicos o juegos por internet de su hijo durante el verano.
- Inicie o continúe conversaciones francas con su hijo acerca de sus amistades. ¿Están haciendo amigos nuevos en el campamento o en sus actividades de verano? ¿Qué actividades compartidas disfrutan?
- Mantenga la conexión de sus hijos con los amigos de la escuela organizando planes para que se vean y se mantengan en contacto durante el verano.
- Sea un ejemplo de respeto e inclusión para sus hijos en lugares nuevos o al conocer a personas nuevas, y fomente este comportamiento en su hijo.
- Incorpore actividades familiares a sus horarios, para reforzar los vínculos y divertirse juntos.
- Si su hijo sufrió acoso y todavía se siente triste, deprimido, ansioso, evalúe consultar a su pediatra y analice opciones para ayudarlo a sanar.
- Si su hijo va a asistir a una escuela nueva en el otoño, averigüe sobre el ambiente, las iniciativas de prevención del acoso y las políticas sobre acoso de la nueva escuela.
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